viernes, 29 de octubre de 2010

Safo

Igual a los dioses se me aparece
ese hombre que, sentado
frente a tí, de cerca escucha
tu dulce voz
y tu risa adorable; ello me ha dado un vuelco
al corazón dentro del pecho;
pues apenas te miro, ya hablar
no me es posible,
sino que mi lengua se quiebra, un leve
fuego al punto me corre bajo la piel,
nada pueden ver mis ojos, me zumban
los oídos
me cubre el sudor, un temblor me posee
toda, me siento más pálida que la hierba
y a mí misma me parece que cerca estoy de morir.
Más todo se puede soportar, pues.

-Nota: Aquí podeis ver algunos poemas de Safo.

miércoles, 13 de octubre de 2010

Fabula de "El escarabajo y el gusano"

Un gusano y un escarabajo eran amigos y se pasaban charlando largas horas.


El escarabajo estaba consciente de que su amigo el gusano era muy limitado en movilidad, tenía visión muy restringida y era muy tranquilo y pasivo comparado con los escarabajos.

El gusano, por su parte, estaba muy consciente de que su amigo el escarabajo venía de otro ambiente, y de que, en comparación con los gusanos de su especie, comía cosas desagradables, era muy acelerado, tenía una imagen grotesca y hablaba con mucha rapidez.

Un día, la compañera de vida del escarabajo le cuestionó a éste su amistad con el gusano, preguntándole cómo era posible que caminara tanto para ir al encuentro de un ser tan inferior, un ser tan limitado en sus movimientos…… y por qué seguía siendo amigo de alguien que ni siquiera le devolvía los saludos efusivos que el escarabajo le hacía desde lejos.


Pero el escarabajo estaba consciente de que, debido a lo limitado de su visión, el gusano muchas veces ni siquiera veía que alguien lo saludaba y, si acaso llegaba a notarlo, no distinguía si era o no el escarabajo, y por ello no contestaba el saludo. Sin embargo, el escarabajo calló para no discutir con su compañera.


Fue tanta la insistencia de la escarabaja y tantos sus argumentos cuestionando la amistad que su compañero mantenía con el gusano que el escarabajo decidió poner a prueba esa amistad alejándose del gusano para esperar a que éste lo buscara.


Pasó el tiempo, y un día llegó la noticia de que el gusano estaba muriendo, pues su organismo se había resentido por los esfuerzos que cada día hacía para ir a ver a su amigo el escarabajo y, como no lo conseguía durante toda una jornada diurna, el gusano tenía que devolverse sobre sus pasos para pasar la noche en el refugio de su propia casa.


Al saber esto, el escarabajo, sin preguntar a su compañera, decidió ir a ver al gusano.

En el camino se cruzó con varios insectos que le contaron de las diarias e infructuosas peripecias del gusano para ir a ver a su amigo el escarabajo y averiguar qué le había pasado.

Le contaron de cómo se exponía día a día para ir a buscarlo, pasando cerca del nido de los pájaros. De cómo sobrevivió al ataque de las hormigas y así sucesivamente.

Llegó el escarabajo hasta el árbol donde yacía el gusano esperando ya el momento final. Y al verlo a su lado, el gusano, apenas con un hilo de vida, le dijo al escarabajo cuánto le alegraba ver que se encontrara bien.Sonrió por última vez y se despidió de su amigo sabiendo que nada malo le había pasado a éste.

El escarabajo sintió vergüenza por haber permitido que las opiniones de otros minaran su amistad con el gusano y sintió dolor por haber perdido las muchas horas de regocijo que las pláticas con su amigo le proporcionaban y, sobre todo, por haberle puesto en una situación que le causó la muerte.

Al final entendió que el gusano, siendo tan diferente, tan limitado y tan distinto de lo que él era, era su amigo, a quien respetaba y quería porque, a pesar de pertenecer a otra especie, le había ofrecido su amistad.

Y así aprendió varias lecciones ese día:

La amistad está en ti y no en los demás. Si la cultivas en tu propio ser, encontrarás el gozo del amigo.

El tiempo no condiciona las amistades. Tampoco lo hacen las razas ni las limitantes propias o las ajenas.

Cuando pierdes un amigo, una parte de ti se va con él. Las frases, los gestos, los temores, las alegrías, las ilusiones, … todo lo que ambos compartieron en el tiempo, se va con él.

El escarabajo murió poco después. Nunca se le escuchó quejarse de quien mal lo aconsejó, pues fue decisión suya el prestar oídos a las críticas sobre su amigo.

Si tienes un amigo no pongas en tela de juicio lo que él es, pues sembrando dudas cosecharás temores. No te fijes demasiado en cómo habla, cuánto tiene, qué come o qué hace, pues con ello estarás echando en saco roto tu confianza.

Reconoce la riqueza de quien es diferente a ti y, aun así, está dispuesto a compartir contigo sus ideales y temores.

La esencia del gusano y el escarabajo se volvieron una sola en el plano más allá de esta vida.

No sé si eres el gusano y yo el escarabajo, o al revés, pero seguro que somos distintos y que nos movemos en planos diferentes. Yo, aunque sea gusano, te seguiré buscando día a día; pero si fuera escarabajo, no prestaré oído a las críticas, vengan de donde vengan.

Si fuera gusano, ignoraré lo grotesco que me puedas parecer.

Si fuera escarabajo, haré uso de mis habilidades para servirte.

lunes, 11 de octubre de 2010

Hasta pronto lanjarón..


El jueves por la noche sobre las 11y30 de la noche, recibí la mala noticia del fallecimiento de mi abuela, apenas una hora antes había estado con ella, como cada día. Fui rápidamente al hospital y pude despedirme de ella. La verdad es que llevaba tres días muy mal, sólo sabía que me oía por el movimiento de las cejas, cuando ella me oía o yo la tocaba. Nunca pensé que me iba a tocar un año y medio lleno de sufrimiento y de mucha lucha constante con ella. Aparqué todo, abandoné muchas cosas pero no me arrepiento de absolutamente nada, volvería atrás en el tiempo y volvería a hacer lo mismo, con tal de pasar con ella todo el tiempo posible hasta el último segundo de vida. Yo me crié siempre en casa de mi abuela, al igual que mis hermanos. Estaba con ella los fines de semana hasta las 2 de la mañana viendo la tv, comiendo roscas o haciendo sopa de letras, mientras que por aquel entonces mi abuelo decía que nos dejáramos de estudiar y fuéramos a dormir jeje. Al tiempo se fue mi abuelo y tomé la decisión de estar con mi abuela todos los días, quedarme a dormir por un tiempo y así fue. Con ella he compartido muchísimas sonrisas, risas y lágrimas. Era mi 2º madre, por eso ahora al quedarme sin abuelos me siento un poco huérfana en cierta medida. Siempre intenté ser una buena nieta, me encargué de todo lo que pude, no quería que le faltará de nada, y que a pesar de estar encamada disfrutará de lo poco que podía. Ahora me he quedado sin sus abrazos, sin su voz,sin su olor, sin sus consejos pero pensaré siempre en ella. En su manera de actuar, en los principios que siempre me enseñó y sobretodo en todas las tardes llenas de café y punto de unión entre la familia. Si, mi abuela tenía el poder de unirnos a todos siempre, cosa que ahora será diferente. También echaré de menos tus patujadas cuando te molestaba llamándote lanjarón y cogiéndote del brazo, o "jocico" y cogiéndote la nariz y un largo etc. Tampoco olvidaré lo que te encantaba verme vestida de típica, o en la tv cantando y bailando en los días de canarias o actos de romerias, que me mandabas a callar para verme. Como aún sigo echando de menos a abuelo, cuando se ponía a "sacarme aceite" del tobillo que me hacia llorar jeje.. o cuando me caí que aún tengo la cicatriz y que cuando me pica pienso que él se esta acordando de mi... tantos recuerdos que siempre estarán en mi memoria. Espero que ahora esté disfrutando del paraíso, lleno de paz, sin sufrimiento y al lado de abuelo. Desde ahí te pido que nos eches un cable de vez en cuando, y sobretodo que me ayudes con mi papi, él también te echa mucho de menos y se siente muy mal por no haber podido ir a despedirse de ti. Nunca te olvidaremos, siempre estarás aquí, en nuestros corazones, nuestros pensamientos y en nuestras oraciones. Y materialmente, me quedaré con vuestra alianza que me diste cuando aún podía y tenías uso de razón, decías que nadie mejor que yo para tenerla, y te prometo que no me separaré de ella. No olvides que te quisé, te quiero y siempre te querré. Quiero dar las gracias a quiénes en ese año y medio me ha brindado todo su apoyo, me ha entendido y sobretodo ha estado allí. A los que fueron al duelo y entierro para apoyarme y no sentirme tan sola. Gracias!!

P.D: Un día inolvidable es el de la foto, día de mi orla de bachillerato, en el que te sentías muy orgullosa de mí.